La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) estima una proyección de crecimiento en 2023 para las economías de Centroamérica. Estas previsiones se configuran debido a una revisión al alza del aumento de los Estados Unidos, el principal socio comercial.
Según la CEPAL, a finales de 2022, se planeó un crecimiento del 3 % para la región centroamericana y se estima que para finales de este año el producto interior bruto (PIB) cerrará con un aumento del 3,1 %. Se observa una mejora y es, incluso, superior al promedio de Latinoamérica.
Deuda pública en aumento
Si se hace una investigación por cada país de Centroamérica, se observa una subidas del PIB. Los casos más destacables son de El Salvador que alcanza una proyección del 2 % y Honduras que llega al 3 %. Por su parte, otros países han crecido porcentualmente muy poco como son Nicaragua, Panamá y Costa Rica. En el caso particular de Guatemala se ha quedado estable con 3.2 % de proyección.
Desde CEPAL señalan que, además de los riesgos financieros, existe una incertidumbre acercad e los posibles efectos que la prolongación de la guerra de Ucrania y el aumento de la fragmentación geoeconómica pueden tener en el crecimiento económico, los precios de las materias primas y el comercio mundial, tanto a nivel global como regional.
Por ese motivo para este año se prevé que los países de Latinoamérica se enfrenten a restricciones en su política fiscal y monetaria. Aunque la inflación esté disminuyendo y se espera que se alcance el final del proceso de aumento de las tasas de interés en varios países; los efectos de la política restrictiva sobre el consumo privado y la inversión se desarrollarán con mayor intensidad este año debido a los retrasos en la implementación de la política monetaria.
Además, debido a la volatilidad financiera global reciente y los problemas en la banca en Europa, no se espera que haya un ciclo generalizado de relajación monetaria en la región.